CANCER NO ES SINONIMO DE MUERTE. VILLA VURRY. Sigo con la redecoración de mi querido hogar, por cierto que es un hogar, invalido, lo mismo que yo, ya que para que fuera un hogar completo ,le falta lo mas principal, que es la mujer, por lo tanto también esta huérfano, pero yo que gracias a lo que uso mi mente y la energía que me produce, se que no tengo mas remedio que admitir mi situación y tratar por todos los medios, que tenga a mi alcance y si no me los invento, de fabricarme una felicidad virtual, ya se que no es lo mismo, pero quien no ha soñado con esa felicidad que nos gustaría disfrutar y que por las circunstancias que sean, no la hemos conocido, yo no entro en ese paquete de personas, ya que no solo la he conocido, si no que en mi mente y en mi corazón, la sigo disfrutando y hablando de esa palabra tan maravillosa, que se llama felicidad. Siempre os he comentado que la felicidad completa, ni ha existido, ni existe, ni nunca podrá existir, siempre suele suceder algo, algún acontecimiento, un desengaño o cualquier otra causa, que lo ensucia o simplemente ese amor tan maravilloso, que todos hemos soñado tener, se termina por las causas que sean y que pueden ser miles, o en muchos caos una sola, ero lo suficientemente poderosa, como para que s tenga que terminar, bien por una de las partes o de mutuo acuerdo, este ultimo fue mi caso. Pero estaba describiendo la redecoración de mi hogar y quiero terminar con ese tema. Nada mas entrar en mi hogar, lo primero que se respira. e una paz y una tranquilidad, que no es muy normal, ya que entramos y lo primero que vemos es esa TORRE EIFIEL de Paris, la ciudad de la luz y del amor, según dicen casi todos los que la visitan yo que la vi en compañía de mis queridos padres, si es cierto que me gusto mucho lo poco que vi, pero no note esa sensación de felicidad, que hubiera sentido de haberla vuelto a visitar con la que fue mi ultima pareja sentimental y que conste que al dia siguiente de conocerla personalmente, le propuse irnos unos días a Paris y no quiso, eso que nos perdimos los dos. Pero no creáis que la conoci ese dia, ya la conocía a través el teléfono y mis muchos dineros de llamadas que me costo, hasta que vine a Madrid a conocerla. Ahora vuelvo.